Los clientes hoy en día desean acudir a
un centro que le solucione todas sus necesidades. Sin embargo, ofrecer todas
las soluciones estéticas existentes en el mercado a nuestros clientes, no tiene
porqué significar tener un gran centro con muchos empleados y una gran
inversión.¡Vamos a descubrirlo!
Si alguna lección hemos aprendido de
esta crisis económica es que hay dos tipos de negocios que están obteniendo una
buena rentabilidad y jugosos beneficios durante este período. Por un lado los
grandes centros con un gran número de empleados que pueden ofertar múltiples
servicios a precios muy competitivos, y por otro, los pequeños pero acogedores
centros de estética que ofrecen a sus clientes un trato exclusivo y muy
personalizado, con una alta especialización y precios más elevados y por lo
tanto, con mayores márgenes de explotación.
La crisis ha hecho florecer un gran número
de empresas que permiten a los pequeños centros “tipo boutique” subcontratar
servicios a empresas especializadas en un tratamiento estrella. Estas empresas
en época de crisis y ante el descenso de la actividad de formación y
disminución de los ingresos por las ventas de aparatología y productos, han
reconvertido a sus equipos de formadoras y demostradoras en prestadoras de
servicios.
Estas profesionales de gran experiencia,
son especialistas en las técnicas que aplican, permitiendo a los pequeños centros
ofrecer a sus clientes las últimas novedades y avances tecnológicos, con
tratamientos de resultados exquisitos a precios medio-altos, proporcionando
excelentes ingresos en concepto de comisiones. El pequeño centro de estética
obtiene de este modo una alta rentabilidad, tan solo por ceder el espacio y
comercializar el tratamiento, sin incurrir en inversión de tiempo, ni dinero,
ni preocupaciones y ofreciendo a sus clientes los mejores resultados y las
últimas técnicas y novedades.
En época de crisis, los clientes también
seleccionan dónde se gastan su presupuesto en estética, seleccionando
tratamientos de mayor nivel técnico que aunque impliquen un mayor desembolso
inicial, les ofrezcan resultados inmediatos, visibles desde el primer día, que
no les implique gastos posteriores de mantenimiento y que sean duraderos.
La micro como alternativa efectiva a la
crisis La micropigmentación aplicada por Técnicos Especialistas se ha
convertido en esta época de crisis en una solución a tener en cuenta para
muchos pequeños centros de estética. Ahora bien, hay que saber comercializar
este tipo de tratamientos de precio alto, recibiendo una buena formación en
marketing, realizando jornadas explicativas en los centros de estética,
teniendo materiales de apoyo que atraigan a las clientes, y ofreciendo
tratamientos de micropigmentación que apliquen nuevas y avanzadas técnicas en
micropigmentación. Estos nuevos tratamientos, deben ser realizados por Técnicos
Especialistas que se dediquen casi en exclusiva a la micropigmentación.